viernes, 13 de abril de 2012

LAS AGUAS SUBTERRÁNEAS DE MURCIA SALVARÁN EL HONDO

Laguna en el parque Natural del Hondo, Vega Baja del Segura, Elche, Alicante

Un pozo artesiano surgente realizado recientemente por
la empresa TRAGSA en el Parque Natural del Hondo (Elche) viene a confirmar lo que ya decíamos hace más de un año (ver noticia de Información de Alicante del 17-12-2010). Y era que debajo de las lagunas de dicho humedal hay agua subterránea confinada a alta presión, y que si se perforaran pequeños pozos en el lecho de sus lagunas perimetrales,  que permanecen  secas casi todo el año (como las denominadas Balserones y Claudia), esta agua subterránea saldría sola al exterior, sin medios mecánicos, y las inundaría, aumentando así la superficie total inundada durante más meses al año.

Esta agua, que está allí desde siempre, debajo del propio Hondo, y que va a permitir salvar todas las lagunas, garantizar el futuro del parque y relajar las tensiones entre regantes y conservacionistas. Es agua subterránea que baja desde Murcia a varios cientos de metros de profundidad por debajo del cauce del río Segura y sin relación con él. Es el agua del ACUÍFERO PROFUNDO de las vegas media y baja del Segura, como ya decía el IGME (1978) y que recientemente ha confirmado la CHS con la perforación de varias decenas de pozos profundos de sequía (Turrión y otros, Elche 2008).

El agua almacenada por debajo del suelo del Hondo, inicia su largo recorrido infiltrándose al oeste de Murcia, en las localidades de Alcantarilla, la Ñora y Rincón de Seca y en los relieves montañosos calizos que flanquean el valle del Segura por el norte y por el sur. No podemos descartar además, aportes laterales subterráneos procedentes de más arriba: desde la vega de Molina de Segura por el norte y desde el valle del Guadalentín por el oeste, hasta completar un total de unos 100 hectómetros cúbicos anualmente que se suman a los aproximadamente 2.000 que ya están almacenados en el acuífero.

El flujo subterráneo baja lentamente entre los granos de grava de los estratos ocupando todo el valle del Segura, y una vez que deja atrás Orihuela y choca con la barrera impermeable de Benejúzar, se ve obligado a doblar hacia el norte, adentrándose en las cuevas sumergidas de los cabezos de calizas y dolomías karstificadas de Callosa, Catral y de San isidro. El recorrido del agua termina en parte por aflorar en el fondo de asomos calizos (como el que hay junto a las antiguas piscinas de San Isidro), en los azarbes que bordean el Parque del Hondo (como el del Convenio) y en "ojales" ubicados dentro del propio espacio natural. 

Surgencia subterránea por medio de fallas en San Isidro.
El agua presenta cierto termalismo  (26ºC) debido a su recorrido profundo

Azarbe del Convenio y, a la derecha,
incorporación de la surgencia anterior de San Isidro

Otra parte del flujo queda retenido y comprimido debajo de las lagunas, esperando que la mano del hombre las libere y las deje salir a ayudar al Hondo, a su avifauna y a su vegetación de humedal, para que nunca les falte agua, para preservarlo para siempre y para las generaciones futuras.


Mapa del Parque del Hondo

El citado diario de de Alicante decía, en la noticia que publicaba  el 17-12-2010, que "La actuación que se plantea consiste en "pinchar" el acuífero dentro del Parque Natural para que las lagunas secas se llenen de agua mediante sondeos para poner fin al estrés hídrico que padece este paraje. 

En algunos casos y a tenor del nivel del propio acuífero, la aportación del agua se realizaría de forma natural, sin la intervención de motores para elevar el agua. En otros la extracción sería mediante molinetas de tracción eólica

Los sondeos se prevé en un principio que tengan una profundidad de entre 20 y 30 metros para salvar la capa de arcilla impermeable y llegar a los sedimentos de grava donde se sitúa el manto hídrico "cautivo", según explica el hidrogeólogo de la CHS Francisco Turrión. Y tendrían como objetivo final el mantenimiento de las distintas lagunas del Hondo con una lámina de agua todo el año que mejoraría sensiblemente sus condiciones ambientales".

La prueba de lo que "decíamos ayer": es el pozo surgente de la foto de abajo, realizado hace poco por la empresa TRAGSA dentro de un proyecto para regenerar las lagunas  cofinanciado con fondos FEDER, la Generalitat Valenciana y el extinto Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.

Pozo surgente recientemente construido cuyas aguas van a la laguna Balserones del parque del Hondo.
El agua  que sale sola del pozo  (cerrado con tapadera de chapa, derecha de la imagen) es conducida por una pequeña tubería enterrada hasta la canalización de obra  que la incorpora a la laguna que aparece al fondo de la imagen.

Dicho pozo tiene apenas 36 metros de profundidad. Atraviesa una primera capa impermeable  de unos 28 metros de arcillas grises y debajo están el nivel de gravas de unos pocos metros de espesor que tiene el agua confinada. Desde esa profundidad asciende sola por descompresión hasta la superficie dando un caudal de unos 4 litros por segundo.

La experiencia piloto ha sido un éxito, como nos explica el geólogo de TRAGSA José María Montes Villa. Nos cuenta que hay zonas donde los niveles de gravas están más próximos a la superficie y podrían ejecutarse zanjas drenantes en vez de pozos, que aportarían mucho más caudal a las lagunas.

También nos comenta que con la Generalitat Valenciana ya han hecho otro sondeo surgente como éste en la Albufera de Valencia, concretamente en la laguna del Tancat de la Pipa.

Allí, el pozo da 15 litros por segundo de un agua de buena calidad. También, y  de la misma forma, se están recuperando los humedales de Algemesí, en la reserva natural del pez Samaruc (Valencia hispánica) endémico de la zona y en peligro de extinción allí y extinguido en el Hondo hace años. ¿Podríamos volver a ver este pez en las lagunas del Hondo gracias a estos nuevos aportes de agua subterránea?

¿Pero qué pasa cuando los pozos dejen de ser surgentes en los años secos, cuando la lámina del agua en él descienda por debajo de la cota del terreno? Entonces la fuerza del viento entrará en acción. Esta podría hacer girar molinetas eólicas conectadas a émbolos de bombeo que sacarían ese mismo caudal a las lagunas o incluso más caudal.

Situando estratégicamente una decena de estos pozos en las lagunas que antes se secan en verano, podríamos obtener entre 50 y 80 litros por segundo casi todos los segundos del año, ya que en la zona siempre corre brisa. Volumen que supondría unos 2 hectómetros cúbicos más de agua al año al humedal. 

Simulación de una molineta eólica sacando agua subterránea
al lecho de lagunas secas en verano

Como vemos, el estudio científico del enorme potencial de aguas subterráneas que tenemos, además de permitirnos beber, regar, desarrollar la industria y crear empleo, nos posibilita regenera y preservar importantes ecosistemas naturales a muy bajo precio, aumentando el valor añadido de nuestro territorio. Esta es otra forma de entender el mundo. ¿Quién se apunta?

1 comentario:

  1. Nos pilla un poco lejos, pero aquí le hago entrega de una noticia

    http://es.noticias.yahoo.com/%C3%A1frica-esconde-inmensa-reserva-agua-subterr%C3%A1nea-capaz-frente-095046279.html?fb_action_ids=362463330455489&fb_action_types=news.reads&fb_ref=type%3Aread%2Cuser%3AH98Y9SbzVnIgonLIJMsTO0hHack&fb_source=other_multiline&code=AQA0XTZLc38WPlSwUlhMuEqFyyyycoYYQK0mC-N7n4s8AjV1aU9MVCOgANX09hjTAi8KqJi_a_ctifI6vRJis_oYIABS5oPyoKHY3RF-VAyM4_fdXlGha8WQwBOallu9Cv7rlqZiBf4eSMhDYV8ZO_t9gCHMDJ04ULeW32U29_ys6sP_EbUHyH0FHoSAwGOiaIzzO-2ma26FHr5P7hxmBCd2#_=_

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